La nutricionista experta en seguridad alimentaria en situaciones de emergencia y desastres, Susana Raffalli, explicó que para la comunidad internacional es muy difícil definir cuando un país vive una crisis humanitaria. “Para poder responder en qué estadio de una emergencia estamos en Venezuela tendríamos que tener datos más precisos”.
No obstante, aclaró que pese a la escasez de alimentos, el país no se encuentra en una situación de hambruna. “Estamos bastante lejos de eso. La situación se ha desestabilizado y hay un deterioro que comienza a ascender y a eso hay que ponerle escalas”, acotó en el Foro A Tiempo de Unión Radio.
Raffalli resaltó que en estos momentos lo más perjudicial, desde el punto de vista nutricional, es la baja proporción de proteínas que consume la mayoría de los venezolanos. “Podemos estar ahora en una crisis de disminución de proteínas del alto valor biológico, de origen animal, que nos está poniendo en una situación de deficiencia de hierro y otros nutrientes”.
Por su parte, la nutricionista, miembro de la Fundación Bengoa para la Alimentación y Nutrición, Betania Blanco, explicó que la mala alimentación debido a la escasez de productos está incrementando los niveles de obesidad. “Cómo vamos a calificar la falta de alimento en un niño que tiene sobrepeso más está mal nutrido”.
