Según datos oficiales del Tribunal Supremo Electoral, con el 3% de las mesas escrutadas, en Bolivia se impone el “No” a las aspiraciones del presidente Evo Morales a presentarse en las elecciones presidenciales de 2019.
De confirmarse el escenario, sería la primera derrota directa en los 10 años que lleva en el poder Morales, uno de los últimos representantes del llamado socialismo del siglo XXI. Previamente su partido había perdido en 2015 plazas clave en las elecciones municipales.
Morales, el primer indígena aymara en llegar a la presidencia, está afectado por el escándalo del supuesto tráfico de influencias en favor de su ex pareja, Gabriela Zapata, quien a sus 28 años es una alta ejecutiva de la firma china CAMC, con contratos con el Estado por 576 millones de dólares. La Contraloría y el Congreso investigan el tema.