Las fugas de reos en el país ya no asombran. Esta vez 17 de los 83 prisioneros recluidos en la comisaría La Mata, de Cabudare, estado Lara, se fugaron en la madrugada de este miércoles, ¿será que los custodios se durmieron?.
Divididos en tres espacios, se encuentran los internos de la comisaría de Cabudare. Dos cuartos que tienen comunicación, cada uno de cuatro de largo por cuatro de ancho, aproximadamente, con una capacidad para diez internos, pero en realidad conviven 75 personas. Los mismos duermen entre colchonetas, sentados y hamacas. Sin divisiones algunas se encuentran los cristianos, los de alta peligrosidad, y en otro salón aparte, están 8 reos más.
Contaron a los ocho que están aparte y cuando entraron a los otros calabozos, se dieron cuenta que habían 58 y no 75 como debería ser. Por más que preguntaron entre ellos, ninguno quiso decir nada al respecto y en el momento en que comenzaron a revisar, los Polilara se dieron cuenta que por la parte de atrás reventaron unos barrotes. Quedaba un hueco pequeño como de 30 centímetros de alto y 50 centímetros de ancho. Fue un trabajo de hormiguita que ya estaba planificado y el día de ayer, alcanzaron su cometido. Por el hueco que hicieron, comenzaron a salir uno a uno, caían en especie de un pasillo que no tiene vista a los funcionarios y de allí saltaron una pared de dos metros de altura; la misma da a casas vecinas.
De inmediato se dio la alerta y se comenzaron a desplegar al menos 40 funcionarios de Cabudare en operativo especial. A ellos se sumaron los de la Brigada Motorizada y las alarmas están activadas también entre funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), y de la Brigada de Estrategias Especiales del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Al lugar se presentaron efectivos del cuerpo detectivesco quienes comenzaron a indagar como fue el hecho. Trascendió que eran siete los Polilara que estaban de guardia y los mismos pasan a ser investigados para determinar si existe algún tipo de complicidad.
Se entrevistaron a los residentes de los alrededores, todas las personas estaban asustadas, algunos indicaron que vieron correr hombres descalzos y otros que andaban hasta en bóxer. Al resto de los privados de libertad los mantuvieron en el patio, mientras se hacia la revisión en las celdas.
¡Oh y tienen el sueño liviano! en dado caso de que los siete funcionarios se hubiesen quedado dormidos, lo cual sería muy raro.