Los gritos y expresiones de evidente indignación, un grupo de personas irrumpió ayer en un recorrido que hacía el gobernador del estado, Nelson Moreno, por la cocina del hospital Luis Razetti de Barcelona, para denunciar que durante la contingencia eléctrica que este miércoles dejó sin luz el recinto sus parientes recién nacidos murieron.
Según los manifestantes, unos 10 neonatos fallecieron durante la noche del miércoles. Sin embargo, el director del hospital aclaró que fueron siete los niños que murieron.
Luz González, tía de un bebe que nació este martes con deficiencias respiratorias, narró la situación de angustia que vivió durante unas cuatro horas, al no saber las condiciones de su sobrino durante el apagón.
Contó que cerca de las 2:00 de la tarde la luz se fue y desde ese momento no pudo entrar al área donde tenían al niño con respiración artificial, debido a sus deficiencias, por lo que tuvo que esperar afuera, muy nerviosa.
Según González, los trabajadores y médicos le aseguraban que tenían la situación controlada y que había electricidad, pero no le permitieron cerciorarse de cómo estaba el niño, sino hasta después de las 6:00 de la tarde, cuando se enteró de que había fallecido.
La mujer aseveró que de 2:00 a 6:00 de la tarde aproximadamente no hubo luz en el piso de Neonatología y que esa situación pudo haber provocado la muerte del pequeño, quien desde su nacimiento, un día antes, se había mantenido estable.
Angélica Jiménez, quien se identificó como la abuela de otro de los neonatos que murieron, se mostró muy alterada y pidió a gritos explicaciones al director del recinto y al gobernador del estado, Nelson Moreno, quienes conversaron con ella y ofrecieron la oportunidad de aprovechar a los medios de comunicación para que expresara su inconformidad.
Jiménez repetía constantemente que su nieto murió por las fallas eléctricas.
Otra mujer que también afirmó que había perdido a un familiar, informó que el primer pequeño murió a las 5:00 de la tarde y era el nieto de Angélica Jiménez.
Respuesta rápida
El recién nombrado director del hospital, Luis Díaz, confirmó que el miércoles fallecieron siete recién nacidos, pero aseguró que la razón no fue el apagón, debido a que el área de los neonatos recibió respuesta inmediata a la contingencia. “Estuvieron menos de 40 minutos sin luz”.
Explicó que tres de los bebés murieron en horas de la mañana y los otros cuatro durante la contingencia.
200 millones de bolívares fueron destinados para la cocina del hospital Razetti, de los cuales 60 millones han sido invertidos en las cinco cavas que serán puestas en funcionamiento el próximo lunes, informó el gobernador Nelson Moreno.