Apagones día y noche, negocios y hogares a oscuras o iluminados a duras penas, electrodomésticos quemados y familias cenando a la luz de las velas. Es el escenario de la sociedad venezolana ante una crisis eléctrica que el gobierno justifica con el fenómeno ” El Niño”.
Sin embargo, en mayo de 2015 Nicolás Maduro recibió un punto de cuenta titulado: Situación de la generación eléctrica nacional y acciones para minimizar el impacto de la variabilidad climática.
Solo en la tercera página, el punto de cuenta revela que la luz eléctrica nacional estaría subsidiada en un 95% para diciembre del año 2015. “Esto tendría un impacto muy negativo sobre cualquier medida de uso racional de la energía”, se lee en el documento.
Maduro simplemente obvió tan importante tema y hoy las consecuencias se vuelven palpables.