“Todavía está barata”, decía el vicepresidente de la República, Aristóbulo Istúriz, en respuesta al aumento de la gasolina que anunció el presidente Nicolás Maduro el pasado 17 de febrero, opinión que aún defiende y rescató este domingo en su visita al estado Zulia, cuando dijo en Maracaibo: “Creo que se deberá hacer otro aumento de la gasolina, de manera progresiva, ya que no se aumentó el diésel”.
Expertos en economía no rechazan la medida, sin embargo, la consideran insuficiente y solitaria para encaminar la crisis económica. El especialista en macroeconomía, Miguel Molero, manifestó que “ese aumento lo único que haría es avivar más el fuego de la inflación, porque Venezuela no cuenta con una infraestructura alternativa de transporte y todo lo que se transporta es por vía terrestre”.
Molero explicó que la clase media cargará con el alza en el transporte público, el propio combustible y los aceites, así como el aumento en los productos de primera necesidad. “Estas medidas son las que van a acentuar más esa inflación inducida, pero inducida por el Gobierno, porque la impresión de dinero a través del BCV, el aumento de la liquidez monetaria, sin haber producción, simplemente va a incrementar más el nivel de inflación”, expresó.
